Hace 42 años que pasó de este mundo al Padre el recordado obispo de Talca: Manuel Larraín Errázuriz (1966-2008). La importancia de Don Manuel como pastor y profeta del acontecer de su tiempo es innegable. Pocos hombres han influido más profundamente en la Iglesia como él. El hermano Roger de Taizé no dudó en calificarlo como «Precursor». Ahora bien, se corría el riesgo de que las nuevas generaciones no llegaran a conocer la palabra clara e inteligente de este obispo que tenía la capacidad de entusiasmar con sus ideales a adultos y jóvenes; y cuyos pensamientos, intuiciones, compromisos poseen hoy una notable vigencia.
Ya no hay excusa, con esta obra de providencial realización, ponemos a disposición de la Iglesia de Talca, chilena, latinoamericana y universal, los escritos completos publicados en cinco tomos por el P. Pedro de Noi Ballacey; y muchos testimonios de quienes fueron sus admiradores y discípulos.